Este blog es de opinión, no informativo. Las opiniones suelen ser positivas, pero no siempre.

Si quieres, échale un vistazo a las etiquetas a ver si encuentras algo que te interese y contrastamos puntos de vista.

06 julio 2011

Desaparecido en combate


Ya lo veis, colegas virtuales, hace semanas que no cuelgo nada. Mi nuevo empleo, por suerte y/o por desgracia me ocupa muchísimo tiempo, y el poco libre que me queda no me da casi ni para escuchar música. Supongo que algún día apareceré, pero de momento me voy a tomar un descansillo digital.
Saludazos a todos y feliz verano. Lo del feliz verano es sólo para los del hemisferio norte (un guiño al vuelo).

29 mayo 2011

Queen



Queen no es lo mío. Sé que hay muchos buenos escuchadores de música (como Benet) que no estarán de acuerdo conmigo, pero que Queen no sea lo mío sólo es mi problema.

Queen es una de las bandas más importantes de la música moderna, sea rock o sea pop, es indiferente, las etiquetas están de más es una banda como Queen. Muchas de sus canciones se han convertido en himnos para muchísima gente y ganan solera con el tiempo. Y Freddie Mercury es un caso aparte, un personaje único en el mundo de la música. Todo lo que ha pasado a lo largo de su vida, incluso el final, ha servido para alimentar su leyenda y la de su banda. Sin ningún reparo se le podría considerar el mejor cantante de la historia, en todos los aspectos: voz, espectro de voz, técnica, expresión, comunicación… Freddie es la gran estrella, pero el resto de la banda no desmerece en absoluto su calidad.

Pero todo esto no quiere decir que estés obligado a que te guste su música. Hay muchas canciones de Queen que me encantan, pero aparte de “Innuendo” no puedo decir que haya otro disco que me guste de cabo a rabo. No es la técnica, ni la composión, ni la interpretación, es el tono, lo encuentro demasiado solemne para mi gusto, la música de Queen me resulta muy pomposa, incluso a veces empalagosa. Evidentemente no me refiero a los momentos en que muestran todo su poderío rockero, el que conozca bien la música de Queen sabe perfectamente a qué me refiero. Y digo “bien” porque muchas de sus canciones no han parado de sonar en los medios desde que se publicaron (ni pararán), pero si no se escuchan todos los discos de una banda no se puede tener una opinión completa, por eso me puse manos a la obra para llenar ese vacío cultural. Me interesaban sobretodo los primeros, los más rockeros, y sí, hay canciones que me gustan pero el conjunto no me convence del todo.

Es el momento de echar mano del tópico: pa gustos los colores.

23 mayo 2011

Megadeth



En cierta etapa de mi vida me desvinculé casi totalmente del heavy metal por ciertas razones. Siempre se tiende a creer que las cosas son para siempre, pero nada es para siempre. Desde hace un tiempo he ido recuperando los conocimientos metaleros donde los dejé, ya sea buscando por mí mismo o con la inestimable ayuda de Falcatruan de Katarsia.net.

Megadeth. Con Megadeth me quedé en el primer disco. Me gustó mucho, pero supuse erróneamente que habían evolucionado al thrash metal bestia, que era lo que tocaba entonces,  y perdí el interés, a pesar de que ganaron muchísimo prestigio entre los metaleros. El prestigio no se gana porque sí, ahora que he escuchado toda su discografía me ha dado cuenta del calibre de esta banda. Después de su primer disco publicaron otros tres que mostraban una evolución parecida a la de Metallica: cada vez mejores en todos los sentidos. Poco a poco su música iba siendo más técnica, más compleja y elaborada, con mejor instrumentación, sonido y voz, sin renunciar nunca a la potencia y la velocidad, pero sin basarse en ellas como reclamo; con el resultado de su obra cumbre “Rust in peace”, que junto con “And justice for all” de Metallica me atrevería a decir que sentaron las bases del actual metal progresivo.

A partir de ahí, siendo ya un grupo consagrado, se dedicaron a experimentar, que es lo que hacen las bandas con inquietudes musicales siempre nuevas y diversas. La experimentación puede traer resultados difíciles de encajar en el mercado, pero supongo que eso a Megadeth no les importó demasiado, ellos se han dedicado a hacer la música que les ha dado la gana y punto, pasando incluso por discos como “Risk”, lleno de melodías y ritmos pop, más cercanos a Aerosmith que a Metallica; sacando discos con más o menos caña, con un sonido más o menos potente pero siempre elaborado y diferente.

Me quedo con los cuatro primeros. No me puedo explayar demasiado porque los he escuchado todavía pocas veces y no me quiero pasar de listillo, pero lo que sí sé con toda seguridad es que son cuatro joyas del heavy metal que hay que escuchar con mucho mimo y muchas veces para apreciar realmente lo que hay en ellas.

15 mayo 2011

Flotsam and Jetsam – “Doomsday for the Deceiver” (1986).



Uno de los discos que me engancharon antes de desvincularme temporalmente del heavy metal fue éste de Flotsam and Jetsam. El camino que seguía el estilo no me gustaba, las voces, el sonido y la actitud del heavy metal se desbocó por completo. Pero a lo que nunca renuncié fue a la velocidad. Eso sí, con un cierto límite. Por eso me gusta tanto este disco de Flotsam and Jetsam. Es speed metal puro, con una voz suave y agradable, con agudos pero sin abusar, uno sonido ligero desde el punto de vista del género, buenos músicos, sobretodo el batería, que se luce continuamente, buenas y variadas canciones, y momentos muy intensos y profundos, sobretodo en las partes lentas.

He escuchado algo más de la banda pero no me ha convencido, por lo que sé se adaptaron a la tendencia del momento y cambiaron bastante su estilo. Eso no quita que este disco sea una verdadera joya, un discazo de speed metal con mucha, muchísima velocidad.

11 mayo 2011

George Thorogood – “The Dirty Dozen” (2009).



La época más fiestera de mi juventud estuvo marcada por muchos discos, uno de ellos fue “Born to the bad” de George Thorogood. Inolvidables aquellos trayectos hacia el garito más marchoso del barrio en mi andrajoso Corsa TR, con la música a toda leche y los cinco, seis o siete colegas cantando a viva voz en espanglish las canciones de George Thorogood. No está mal de vez en cuando recordar aquellos momentos. Hacía siglos que no sabía nada de GT, y he descubierto que sigue dando caña. “The Dirty Dozen” es un disco con canciones nuevas y viejas. Las viejas no hacían falta alguna, no es necesario tenerlas en discos diferentes, las que importan son las nuevas, y son la hostia.


GT, después de muchísimos años, conserva absolutamente todo lo que tenía y al mismo nivel, y se mantiene fiel a a su estilo y sobretodo a su esencia. Las canciones nuevas tienen el mismo ritmo, la misma marcha, el mismo sonido, la misma voz y el mismo todo que las viejas. Pero lo más importante es que conserva ese feeling tan increíble que tan buenos momentos me dio hace muchos años.

Desde aquí quiero enviar un abrazo, aunque no llegue, a aquel gran colega llamado Carlos, mundialmente conocido como “Gos”.

Aquí hay una buena muestra en directo.

02 mayo 2011

“Es el momento de lucirte, Orianthi”

“Cuando ellos paran, tú sigues, y das tu nota más alta.
Es el momento de lucirte.
Alto, muy alto.
Lo más alto.
Es el momento de lucirte.

Estaremos ahí contigo”.


Si has visto “This is it” seguro que te sonarán estas palabras. Son de Michael Jackson e iban dirigidas a Orianthi Panagaris, la que iba a ser la guitarrista principal del espectacular show que estaba montando, pero pasó lo que pasó… Viendo la película se deduce que Michael estaba en muy buena forma y… ¿nos vamos a poner a hablar de Michael Jackson? Cierto es que nunca se habrá hablado bastante del que considero -con toda la objetividad posible- el más grande artistazo que ha parío madre, pero no soy quién para hablar de él. Que lo considere así no quiere decir que sus canciones hayan sonado alguna vez en mi coche.

Pero… ¿Y Orianthi? ¿Quién es Orianthi?

















 

29 abril 2011

Ha muerto Scott Columbus



Vaya racha llevamos. Su nombre no será tan conocido como el de Dio o Gary Moore, pero su aportación a la música es de un grandísimo calibre. Scott Columbus fue el batería de Manowar en su mejor etapa. Formó parte de la banda desde “Into Glory Ride” (’83) hasta “Warriors of the World” (’02) , se apartó temporalmente por ciertos problemas ajenos a la música que no vienen al caso explicar aquí y se reenganchó con “Gods of War” (’07).

Scott Columbus me enseñó muchísimo. Con él aprendí a apreciar su instrumento, aprendí que la batería puede ser el elemento creativo más importante de una canción, no sólo un componente rítmico. Al lado de Joey DeMaio formaron la base rítmica (y melódica) más impactante y perfecta de la historia del heavy metal.

Ahí quedan discos maravillosos como “Into Glory Ride” o “Hail to England”. Odín te acoja en Valhalla, Scott, has muerto en la batalla y mereces ir allí.